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Año nuevo chino

Año nuevo chino

Con la participación de una gran cantidad de vecinos y turistas, la comunidad china festejó la llegada de un nuevo año. En esta oportunidad, se le dio la bienvenida al año 4721, año del Conejo de Agua.

El Ministro de Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, estuvo presente en el lugar, participó de los festejos, dialogó con los presentes y dejó un mensaje a la gran comunidad china que está presente en la Ciudad de Buenos Aires desde hace muchos años.

“Con su enorme esfuerzo y perseverancia, la comunidad china se fue convirtiendo poco a poco, pero a paso firme, en parte de la identidad argentina y también de Buenos Aires. La ciudad los abraza y recibe a todos los migrantes, ya que su cultura es transcendental”, dijo Jorge Macri.

También participaron de los festejos, Pamela Malewicz, Subsecretaria de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires; Mercedes Barbara, Directora General de Colectividades; Carolina Shang, Vice Presidenta de Phoenix Dorada (asociación co organizadora y representante de la Cámara Argentino China) y el Sr. Sun Yi, Encargado de Negocios de la Embajada de China.

Este año, el evento tuvo más de 50 stands, y en los mismos se pudo degustar platos exclusivos de la cocina china y adquirir objetos de decoración como feng shui, prendas, entre otros. La fecha de esta celebración cambia cada año y corresponde con el día de la segunda luna llena nueva tras el solsticio de invierno, que usualmente ocurre entre el 21 de enero y el 20 de febrero.

También el Ministro de Gobierno, aseguró: “Celebramos el trabajo y esfuerzo de quienes habitan hoy nuestro país, después de dejar el suyo, y por eso es sumamente loable. Esta ciudad siempre los incluyó y los hizo parte desde el primer momento, se integraron rápidamente conservando tanto su historia como sus costumbres y sus tradiciones, que comparten con nosotros desde hace décadas”.

Este año estuvo representado por el “Conejo de Agua” que simboliza el ingenio, la vigilancia y una mente rápida y la suerte en todos los ámbitos de la vida. Además, se colocan en las puertas de entrada de las casas y oficinas, carteles rojos con inscripciones, poemas y buenos deseos y prosperidad para el año que comienza.

Para finalizar, indicó: “Ese vínculo que nuestros pueblos forjaron y ese intercambio cultural que tanto nos enriquece son logros que debemos cuidar, porque son las semillas del futuro que queremos: uno donde todos seamos más tolerantes, capaces de respetarnos en nuestras diferencias y de tomarlas como puentes para seguir creciendo. Gracias por su valioso aporte, por enseñarnos todos los días algo nuevo y por ayudarnos a construir una ciudad pujante. Espero que podamos seguir recorriendo juntos este camino”.

Revista Vasos Comunicantes