GCBA

Imprimir
PDF

Brigada de Incendios Forestales

Brigada de Incendios Forestales

La Ciudad de Buenos Aires tiene desde este lunes su primera Brigada de Incendios Forestales (BIF), una nueva especialidad de Bomberos de la Ciudad para la protección de las tres reservas naturales que tiene el territorio porteño.

Además, este nuevo sector quedará a disposición para colaborar con otras provincias, en el marco del Plan Nacional del Manejo del Fuego.

Trabajaron para su coordinación, la Secretaría de Ambiente de la Ciudad, la Subsecretaría de Emergencias, el cuerpo de Bomberos de la Ciudad, el Instituto Superior de Seguridad Pública (ISSP) y la dirección de la Reserva Ecológica.

La BIF tiene su base en la Reserva Ecológica Costanera Sur, que con sus 350 hectáreas es la más grande de la Ciudad, pero también dará protección a las otras dos reservas, en Lugano (35 hectáreas) y Costanera Norte (23 ha), todas con flora autóctona pampeana.

La iniciativa de la creación de esa brigada especial tuvo su impulso tras la contribución de integrantes del Cuerpo de Bomberos de la Ciudad y de su Grupo Especial de Rescate (GER), en el combate a los incendios en campos de la provincia de Corrientes, en los primeros meses de este año.

El paso posterior fue la apertura de un registro para bomberos interesados en la especialización, que realizaron desde el 31 de octubre al 25 de noviembre el curso en la Reserva Ecológica Costanera Sur, en la sede del Instituto Superior de Seguridad Pública (ISSP) y en el hospital Malbrán, con trabajos prácticos e instrucción teórica.

Los bomberos realizaron una especialización sobre el manejo y coordinación de herramientas en progresivo, nuevas modalidades de combate de incendios forestales, entrenamiento en primero auxilios, trabajos con motosierras y motobombas, y prácticas sobre aproximación y normas de seguridad para las brigadas helitransportadas.

Además, se cambió la perspectiva de cómo mirar al fuego, que no sea un enemigo sino una herramienta, y se hizo un exigente trabajo físico.

Uno de los puntos destacados fue el trabajo conjunto con biólogos y ambientalistas sobre el control de incendios pero también cómo cuidar la flora autóctona, sabiendo extraer la flora exótica invasiva.

Este es un cambio de concepto a nivel mundial, ya que los combatientes forestales, además de bomberos son personal de gestión y conservación ambiental.

Por ejemplo, en las tareas de zapado en progresivo que hacen en los cursos de preparación, con la ayuda de especialistas de ciencias naturales, los bomberos sumaron conocimiento para sacar flora exótica, cuidando las especies autóctonas.

En cuanto a los integrantes de la BIF, unos 22 efectivos recibieron la aprobación del curso y 6 de ellos son mujeres.

Revista Vasos Comunicantes