GCBA

Imprimir
PDF

Arroyo Vega

Arroyo Vega

El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, y el ministro de Desarrollo Urbano y Transporte, Franco Moccia, participaron este sábado de la conexión final de los túneles del Arroyo Vega, que ahora soporta hasta 81 milímetros de lluvia fuerte constante a lo largo de dos horas, lo que beneficia a 315.000 vecinos de la Ciudad.

"Estas obras que no se ven a veces son las más importantes", expresó Miguel.

El segundo emisario del túnel, que se extiende a lo largo de 8,4 kilómetros desde el cruce de las calles Nueva York y Helguera hasta desembocar en el Río de La Plata, duplicó la capacidad de drenaje (antes soportaba hasta 48 milímetros) y minimizó el riesgo de inundaciones en las comunas 12, 13 y 15.

Además, el Jefe de Gabinete porteño indicó que este trabajo "es importante para el crecimiento de la Ciudad y para afrontar el desafío del cambio climático".

"Estamos convencidos de que el tiempo que llevó la obra valió la pena, porque esto es producto de la planificación y del pensamiento a largo plazo", sostuvo.

En esa línea, Miguel agradeció "a todos los trabajadores y trabajadoras que hicieron que este proyecto se hiciera realidad", y también a "los vecinos y a los comerciantes por la paciencia".

En tanto, Moccia apuntó: "En este lugar donde estamos hoy (avenida Elcano y avenida Crámer), cuando llovía había hasta un metro de agua".

“Ahora debajo nuestro hay casi 14 metros de una gran cámara que va a permitir que los sumideros vayan al nuevo arroyo que está debajo de la calle La Pampa. En la primera quincena de octubre los sumideros antiguos de esta zona en vez de ir al arroyo viejo de la calle Blanco Encalada van a ir al de La Pampa”, explicó el ministro de Desarrollo Urbano y Transporte porteño.

Por último, Moccia destacó que la obra del Arroyo Vega "finalizó en las fechas que se habían prometido", y remarcó: "Estamos convencidos de que los vecinos valoran estas iniciativas cuando saben que trabajamos para mejorarles la vida".

La capacidad de captación del emisario era insuficiente, por lo que la infraestructura existente no alcanzaba para contener los niveles de agua en los barrios de las comunas 12, 13 y 15. Ante esto, se trabajó para aumentar la capacidad del arroyo a través de este segundo emisario.

La cuenca del Arroyo Vega se desarrolla dentro de los límites de la Ciudad en una superficie de 1.700 hectáreas. La obra tiene casi el 50% de la superficie del arroyo, de 17 kilómetros.

Para poder llevar adelante este proyecto, se lo dividió en dos tramos: el primero cuenta con 5,9 kilómetros de extensión y para su construcción se utilizó la máquina tunelera “Elisa” (primera mujer egresada de Ingeniería de la UBA en 1918), de 5,30 metros de diámetro interno del túnel, la cual comenzó su excavación en la costanera Norte por debajo de la calle La Pampa hasta la intersección con la avenida Victorica. El segundo, en cambio, cuenta con 2,4 kilómetros con un diámetro interno de 2,30 metros, y se utilizó la técnica de excavación Pipe Jacking, que permite instalar tuberías sin realizar zanjeo. Este tramo abarca desde Nueva York-Helguera hasta La Pampa-Ballivian.

La máquina tunelera Elisa, que funcionó las 24 horas del día de lunes a sábado (los domingos se realizaron tareas de mantenimiento), trabajó a 20 metros bajo tierra (un edificio de siete pisos hacia abajo), avanzando 24 metros lineales diarios.

La cuenca del Arroyo Vega soportaba 48 milímetros de lluvia fuerte constante a lo largo de dos horas, pero con la construcción de este segundo emisario la capacidad aumentará hasta 81 milímetros, lo que reducirá el riesgo de inundaciones.

Para la construcción del túnel trabajaron 400 obreros y se emplearon 43.700 metros cúbicos de hormigón armado, lo que equivalen a 64 Obeliscos.

Desde el 2015, el Plan Hidráulico se presenta como un conjunto de obras compuestas por medidas estructurales, programas y acciones para reducir el riesgo de inundaciones en la Ciudad. Éste es el mayor plan hidráulico desde 1869.

Las otras cuencas que componen al Plan Hidráulico son la Cuenca Maldonado, la Cuenca Arroyo Cildáñez, la Cuenca Larrazábal-Escalada, la Cuenca La Boca-Barracas y la Cuenca Radio Antiguo-Ugarteche.

Revista Vasos Comunicantes