Ciudad competitiva
La ciudad de Buenos Aires es la más competitiva de América Latina y está entre las primeras 25 del mundo, según el índice “Global Cities Index” (GCI), que anualmente elabora la consultora de gestión global A.T. Kearney.
El informe califica 130 ciudades según actividad económica (dinámicas de mercado y flujos de capitales); capital humano (nivel de la educación); intercambio de informaciones (acceso a información a través de Internet y a otras fuentes); experiencia cultural (museos, acceso a eventos deportivos) y compromiso político (eventos, think tanks y embajadas). Su elaboración se basa en la información pública disponible sobre las ciudades.
A nivel global, Nueva York, Londres, París, Tokio y Hong Kong ocupan los primeros cinco lugares. Por su parte, Buenos Aires quedó en el puesto número 24, y mantuvo su posición histórica dentro de las 25 mejores ciudades del índice. La Ciudad integra el grupo de mejores ciudades del mundo, debajo de San Francisco (20), Viena (21), Ámsterdam (22), Barcelona (23) y Boston (22).
Además, Buenos Aires se destaca por ser la ciudad latinoamericana mejor posicionada. La Ciudad ascendió una posición en el índice respecto de 2018, y consolidó su posicionamiento regional e internacional.
Las ciudades latinoamericanas que siguen en el ranking son San Pablo (33), Ciudad de México (40), Río de Janeiro (57), Bogotá (58), Santiago de Chile (60) y Lima (63).
Andrés Mendoza Pena, socio de AT Kearney, señaló: “La edición 2019 de Global Cities se focaliza en el factor que distingue a las ciudades más competitivas del mundo: el capital humano. La capacidad de atraer y retener al talento global es lo que sostiene a las ciudades líderes y acelera el éxito de aquellas que se acercan a la cima. Buenos Aires, además de haberse consolidado dentro del top 25 global, demuestra su mejor desempeño en el área de capital humano, ubicándose en el top 15 global”.
El índice también destaca el progreso de las ciudades clave de China, que experimentaron un crecimiento mayor que las ciudades en las otras regiones del mundo en los últimos 10 años del ranking. La actividad empresarial sigue siendo el factor dominante, pero el capital humano y la experiencia cultural también son importantes impulsores del crecimiento.