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El misterio del barco hundido

El misterio del barco hundidoApareció al limpiar los pluviales en la zona de Migraciones. Fue durante los trabajos que se hacían en la Dársena Norte del Río de la Plata. El carguero sin identificación sería de 1930, de unos 45 metros de eslora y 40 toneladas de peso.

El biducto y el triducto, que desembocan en la zona de Migraciones (Dársena Norte del Río de la Plata), son parte fundamental del sistema de escurrimiento de los pluviales de la Ciudad. Y en medio de la limpieza para que recuperen su capacidad original, se detectó la existencia del casco de un barco sin identificación que obstruía la salida de la descarga del lugar.

Chocaba contra el agua proveniente de la desembocadura, generando reflujo, pérdida de velocidad de escurrimiento y arremolinamientos. Conclusión: se acumulaba arena y sedimentos, formando un banco que obstaculizaba la libre descarga de los pluviales, además de desmejorar la eficiencia hidráulica del drenaje.

"El mantenimiento de la red pluvial es algo que realizamos todos los días y que nos demanda un gran trabajo en equipo. Desde principios de año estamos limpiando este biducto que mide más de un kilómetro de largo, para mejorar el drenaje de la zona. De la misma manera limpiamos el resto de los cursos de agua subterráneos de la Ciudad", explicó Eduardo Macchiavelli, ministro de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad.

No es mucho lo que se sabe del barco. En principio, por lo inspeccionado, sería de aproximadamente 1930, carguero, a vapor, de unos 45 metros de eslora y 40 toneladas de peso, con casco de acero remachado, que estaría probablemente en reparación en el muelle y que quedó a la deriva, deteriorándose poco a poco.

Se ha ido desguazando todo lo recuperable, dejando que el casco se pierda y se atasque en la desembocadura.

La extracción del casco es sólo una parte de la obra de mantenimiento que la Ciudad, a través del Ministerio de Ambiente y Espacio Público, está llevando adelante.

Para la extracción total del barco se irá desguazando y sacando con un guinche por pedazos, con el trabajo de personal de buceo y técnico de apoyo.

Revista Vasos Comunicantes